¿Están listos para más cosas terroríficas que Second Life está dispuesto a dar?
En esta oportunidad, y como parte de mi serie de videos de Youtube (siendo éste el número 6) donde recorro lugares siniestros de esta loca grid, visito: Bay City's Halloween Hay Maze y The cornfield, ambos de Linden Lab.
¿Qué más tenés que hacer? ¿Es que en la vida real podés teletransportarte, ir a diferentes y tan variados lugares a tus anchas gratuitamente (mientras tengas una PC e internet), o bloquear y hacer desaparecer de tu vista a aquellos que te molestan?
Y aquí vienen otra serie de preguntas: ¿se piensan que SL es un lugar donde sólo se hace shopping? Aquí les muestro dos juegos que les va a hacer cambiar la idea, si su respuesta fue positiva.
Así que vení a visitarlos, yo acá y en el video muestro un pequeño vistazo.
Bay City's Halloween Hay Maze
Encontré en Halloween Hay Maze un laberinto de heno bastante difícil de pasar, y que nos ofrece del otro lado, en su salida, dos lugares extras.
Este lugar se encuentra en Bay City, y es de propiedad de Linden Lab, creado por los Moles.
Del primer párrafo de la notecard que nos entregan cuando llegamos:
Bay City: una guía de la ciudad junto a la bahía
Las regiones de Bay City están pensadas para una vibrante experiencia urbana, doblemente preparada para su placer. Las carreteras, los parques, una sala de cine y los servicios de la ciudad ya están en funcionamiento, mantenidos por Linden Lab. Cerca de las oficinas y tiendas de Nova Albion, con amplios canales utilizables para viajes y turismo, pero con playas amplias y limpias y abundante vegetación.
Es un lugar muy grande, tanto, que hay buses que nos transportan de un lado a otro. Pero bueno, no estamos aquí para hablar de esta ciudad, sino de su laberinto de heno.
En el video quizás no tuve tanto tiempo o tenía un poco las reglas confundidas, aunque no tanto, ya que lo básico lo dije, así que, sin más, les cuento cómo lo viví y cómo es:
Entrada del laberinto. Como siempre, para esta clase de experiencias aterradoras, hay que sí o sí utilizar el windlight de la región. Estuve queriendo explorar otros pero ninguno fue mejor.
La idea es explorar sus pasillos y encontrar la salida que se encuentra justo del otro lado.
Y como todo buen laberinto, hay múltiples caminos para elegir, perfecto para una terapia de exposición para personas indecisas como yo.
Pero no todo es color de heno... hay trampillas, fantasmas que nos asustan y arañas que nos persiguen. Pueden resultar como un punto de referencia, o como la causa de que perdamos la cuenta de nuestros pasos.
La vista aérea del laberinto. No es una trampa mostrarlo en una foto porque realmente es imposible que puedan encontrar la salida con estas fotos jeje.
Acá fue cuando realmente me taladré los sesos sin saber por dónde salir. Soy bastante mala para jugar cualquier juego. Pierdo siempre, y tengo peor memoria para recordar el camino que Zoro de One Piece.
Aquí ya me daba por vendida hasta que...
¿Llegué al final! Y ahí me di cuenta que hay que perseverar. Quizás la lección final, a modo de regalo, de este laberinto es darnos cuenta que la vida es ocmo un laberinto. Percevera y encontrarás la salida.
Aquí la salida muestra un mini cementerio y dos carteles con ubiacciones a dos lugares por demás interesantes, de los que pretendo hacer un posteo aquí. No sé si un video..
También realizado por los Moles, un Asilo (para dementes?)
... y un hotel. ¡Definitivamente voy a ir a visitarlos!
Pero no lo haré en esta entrada.
The cornfield
Se encuentra ubicado dentro de Portal Park de Linden Lab donde se encuentran muchísimas atracciones para disfrutar, inclusive la de la casa abandonada y pueblo siniestro de Linden Lab (Halloween Haunted Ride and Haunted Neighborhood) donde quisiera que vayan porque es justamente esa clase de experiencias que viví hace unos años atrás y pensé que no la vería más. También pueden ver el video de ese loco recorrido aquí.
Al entrar al campo de maíz, fui perseguida incansablemente por monstruos como el de la foto de arriba y muchos otros más, y sólo estuve armada con un pedazo de madera. ¿Vale la pena morir por algunas monedas y 20 choclos (mazorcas)? ¡Sí señor!
Esta es la entrada al campo de maíz. Como verán, la iluminación es escasa. No hay que hacer trampa y utilizar otro windlight que no sea de la región, o luces añadidas al avatar.
Cuando llegamos, estamos dentro del granero. Allí tenemos las instrucciones y todo lo que podemos necesitar para entender y jugar este juego. El resto que se escape, lo aprendés corriendo y evitando morir.
Ésto es lo que se ve dentro del granero.
En estas tres TV tenemos toda la información. ¡Este lugar hasta tiene una historia detrás!
A la izquierda es el portal para poder acceder a los premios según los puntos que consigamos, y a la derecha donde depositamos los choclos que recojamos.
La pizzarra que indica quién tiene más puntos. No hay "ganador". Cuando llegamos automáticamente tenemos una cesta en la espalda y un palo en la mano. Un HUD aparecerá a la izquierda de nuestra pantalla que cuenta nuestra vida, choclos, monedas, y qué arma poseemos.
Otra mirada del granero desde el campo de maíz.
Y éste es el campo de maíz. Abajo en el medio se ve a una muchacha tratando de pelear contra los monstruos. Me tomé la libertad de sacarle una foto para retratar su lucha. Como verán, tiene una luz añadida, y eso es hacer trampita. De todas maneras, eso no la ayudó tanto, porque moría de vez en cuando.
Cuando llegué fui caminando entre las hileras de la plantación. Ahí me di cuenta porqué Stephen King hizo el cuento "Children of the corn". Es espeluznante. Y más a la noche.
Los sonidos de pisadas, los ojos fosforescentes que se acercan y pierden entre las hojas...
En un momento recordé cuando paramos en el medio de una ruta con mi familia para robar choclos de un sembradío. Es una de las cosas más divertidas que recuerdo hacer con mi familia. Y ahí supe que están llenos de bichos, que jamás en mi vida había visto. Negros, pinchudos, inmóviles, y de todos los tamaños. Puede ser que los años 80s eran con menos GMOs y pesticidas...
Una cosa que no se puede hacer es quedarse quieto.. Así que corrí. Hay que correr. Ahí se ve bien el palo y la cesta. Una vez que se lleguen a los 20 choclos, tenés que volver y dejarlo en el silo (corn bins)
Si te mata algún monstruo, perdés todos los choclos.
Supuestamente caen en el lugar donde moriste, así que tenés que asegurarte por donde andubiste así volvés a recogerlos, porque cualquiera puede hacerlo.
No hay mucha gente, pero depende de la hora.
Y aquí vemos a un amigo. Uno de los monstruos.
Otro vistazo a nuestro amigo. Así se ve cuando no le da la luz. Bastante creepy.
Y no sé si notan este otro....
Aquí se encuentra un choclo rojo. Creo que salen cuando los monstruos son asesinados.
Este es un... ¿monstruito? Exactamente no sé lo que hacen los chanchitos... Se ven demasiado enternecedores...
...pero, cuando les pegás o les hacés click, disparan un gas de su trasero y pedazos de ¿tocino?
Y éste sería el pollito amigo, junto a un choclo amarillo. Todos los choclos que debemos recoger se encuentran en el piso, no en las plantas.
Cuando le pegamos o hacemos lcick, o inclusive si nos ven, se acercan y nos disparan ese gas verde junto con tres huevos.
Este es otro monstruo. Todos los monstruos por lo que ví de tanto en tanto disparan una moneda que brilla en el piso. Éstas llenarán el contador de monedas de nuestro HUD. Por más que muramos, esas monedas no desaparecerán. Con ellas compraremos productos.
Otro monstruo. Es ocmo un pez-cerdo, podrido. La vela que posee en su cabeza no brilla mucho. Debe ser por la niebla.
¿Y qué pasa cuando morimos? ¿Dónde vamos? En The Corn podemos saberlo: al cementerio.
Esta es su entrada. Supongo que el maíz no se debe comer.. entre monstruos y líquidos cadavéricos no creo que sea posible su aptitud para su consumo...
El cementerio es bastante tenebroso...
Tiene todo lo que tiene que tener: tumbas antiguas, ruidos de ultratumba, luces que apenas iluminan, niebla que roza nuestros tobillos, frío que cala los huesos, nuves grises y gigantes que se disparan en el cielo, inalcanzable, cruces, y mucha gente muerta.
Vista del granero desde lejos.
Hay "safe hauses", o sea, lugares donde uno se puede refugiar sin que te maten, pero no sé si es el de la foto, ya que me han asesinado varias veces en su porch, porque la puerta permanecía cerrada.
Bueno, listo. Aquí termina mi recorrido. Espero que les haya gustado y que puedan venir aquí para que puedan disfrutar estos dos nuevos lugares que les presento en carne propia.
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